Hace unos años una amiga me hace una pregunta. A un familiar suyo le habían recetado un remedio basado en litio y su inquietud era sobre las características de esa medicación.
Obvio que uno no es ni médico, ni bioquímico ni farmacéutico, sólo es un profesor de Química de secundaria. Mi conocimiento del litio era respecto a su existencia en las pilas tipo botón que usan relojes, agendas electrónicas, calculadoras, etc.
Consulté entonces a un médico conocido y es así: el litio se utiliza en el tratamiento de ciertas enfermedades psiquiátricas. Y amplié la búsqueda en otros medios.
En realidad como aclaramos alguna vez en este blog uno dice litio como si fuese la sustancia simple, el metal; pero investigando supe que lo que se emplea es carbonato de litio Li2CO3.Y es usado fundamentalmente en el tratamiento de la depresión bipolar.
La pregunta de mi amiga y la posterior indagación en personas y medios idóneos demuestra que uno va aprendiendo continuamente.
Y qué más podemos decir del litio: que es el menos denso de los metales, el primer elemento (considerando número atómico creciente) cuya sustancia simple es sólida a temperatura ambiente.
Y que por sus buenas propiedades electroquímicas es ideal para su uso en pilas y baterías.
Son muy conocidas en estos tiempos cierta variedad, las baterías de ión de litio, llamada batería Li-Ion, en ella el electrolito en donde se encuentra el cátodo y el ánodo es una sal de litio que permite el pasaje de los iones entre los electrodos. Estas pilas son de gran capacidad, ocupan poco espacio y son muy rendidoras.
Pero tienen un inconveniente: se recalientan mucho. Por ese motivo los fabricantes trabajaron en su diseño para evitar sobrecalentamientos que puedan provocar inconvenientes. Ya hace unos años una empresa fabricante de computadoras comunicó a todos sus usuarios que les cambiaría sin costos sus pilas de ión litio, por problemas que habían surgido en algunos de sus clientes.
Es de hacer notar que como su compañero de grupo el sodio, ambos metales alcalinos, el litio metálico es altamente reactivo al oxígeno y al agua, por lo que se lo almacena convenientemente.
