sábado, 10 de abril de 2010

Helio.


Es el segundo elemento más liviano de la naturaleza luego del hidrógeno.
Posee sólo dos electrones en su único nivel y eso es causa de su gran estabilidad. Existe normalmente sólo como sustancia simple monoatómica, siendo el más liviano de los gases nobles o inertes. Aunque en condiciones extremas se han obtenido compuestos unido al flúor, yodo y fósforo entre otros.
El hidrógeno al unirse a otros elementos o en la molécula de hidrógeno H2 completa una última órbita de dos electrones similar a la del helio. (Existen otros compuestos hidruros metálicos en donde el hidrógeno gana un electrón y forma un anión hidruro).
En la Tierra existe un pequeño porcentaje en la atmósfera y se lo encuentra también mezclado con los gases que acompañan al petróleo en los pozos petrolíferos.
En el Universo es el segundo elemento en abundancia luego del hidrógeno, originándose en las fusiones nucleares que tienen lugar en las estrellas en donde los núcleos de hidrógeno se unen formando helio y liberando energía, tal como ocurre en el Sol.
De ahí deriva su nombre: Helios es el dios griego del Sol.
Fue a partir de un análisis de un espectro del Astro Rey en que se descubrió su existencia, ya que no se podían explicar unas líneas amarillas que en principio se creían de sodio.
Su uso le fue imposibilitado a los nazis por los EE.UU, que luego del desastre del dirigible Hindenburg cuando su carga de hidrógeno provoco un incendio y su destrucción antes de aterrizar en Nueva Jersey, hizo desechar ese gas y necesitaban al helio para reemplazarlo como medio de ascensión para esos aparatos.
Se lo usa también mezclado con aire para que lo respiren los buzos, ya que es menos soluble que el nitrógeno N2 evitando así la enfermedad neumática; al ascender el buzo se evita que el nitrógeno que a la alta presión de las profundidades marinas se disuelve en la sangre, provoque una embolia al ir retomando la superficie y disminuyendo la presión originando burbujas que pueden ser fatales.
Al inhalar helio y hablar, la voz es más aguda pues provoca una vibración distinta a la normal en las cuerdas vocales.
También mencionamos que las partículas alfa son núcleos bipositivos de Helio que se producen en desintegraciones de elementos radiactivos. El descubrimiento de este hecho como lo comentamos en su momento le valió a Ernst Rutherford el Premio Nobel de Química